Un reportaje de El Mundo recoge los 60 años de liderazgo e innovación de Aguilera Ingenieros

El periódico El Mundo pone en valor la trayectoria de más de 60 años de Aguilera Ingenieros, y destaca su papel pionero y la continua innovación en el campo de la ingeniería de nuestra compañía. Acceda al reportaje en este enlace.

Enlace al reportaje: https://www.elmundo.es/economia/actualidad-economica/2023/06/15/6481b4d6fdddffae2b8b45a5.html

Como bien recoge el periódico El Mundo, Aguilera Ingenieros fue una compañía pionera cuando surgió, allá por años 60, y hoy en día sigue siendo una referencia indiscutible en proyectos de alta complejidad tecnológica. Más de seis décadas después, esta ingeniería ha desarrollado centros de procesos de datos para compañías como Mapfre, BBVA o el Banco de España; instalaciones y laboratorios para compañías farmacéuticas y cosméticas, como GlaxoSmithKline, Merck o Beiersdorf; grandes complejos hoteleros en diferentes partes del mundo, aeropuertos, auditorios, edificios en altura como la Torre Foster… Siguen en primera línea.

Efectivamente, en 1961, el año de su fundación, se convirtió en una de las primeras ingenierías de España. De hecho, por aquel entonces no existía la figura del ingeniero consultor, el especialista que asesoraba a las compañías promotoras y constructoras en la parte de instalaciones, la menos visible de un edificio, pero indispensable para su correcto funcionamiento. Benedicto Aguilera, fundador de la empresa, fue el primer ingeniero consultor de España.

Su labor la continuó su hijo, Pedro Aguilera, ingeniero industrial que asumió las riendas de la compañía en 1990. “Me tocó la tarea de profesionalizar la organización, de pasar de una marca muy vinculada a la figura de mi padre, a otra más basada en la gestión y en el equipo humano, que para nosotros es el elemento diferencial”.

En 2019, Pedro también cedió el testigo a los nuevos accionistas, pero siempre dentro de una línea de continuidad que no se negocia. “Los nuevos socios son gente que conoce perfectamente nuestra manera de pensar y de hacer las cosas, personas que llevan muchos años trabajando con nosotros, y también hay savia nueva, con vínculos familiares, un equipo que sabemos que va a dar continuidad a nuestro proyecto.” Las dos personas más jóvenes de ese nuevo grupo de accionistas son dos mujeres, Almudena Aguilera, hija de Pedro y tercera generación en la gestión de Aguilera Ingenieros, y Lucía Estébanez, también hija de un socio histórico de la compañía.

Esa continuidad les permite permanecer fieles a un estilo, a un modelo, a una manera de entender la ingeniería. Se trata de cuidar cada detalle y de ir de la mano con cada cliente. Quizá por eso mantienen relaciones de muy largo plazo con todos ellos: para algunos, Aguilera Ingenieros ha desarrollado y ampliado numerosas instalaciones, desde los años 80 hasta nuestros días. Y siguen colaborando en nuevos proyectos. “Hoy en día priman la rapidez y el corto plazo, resolver rápido —asegura el actual CEO, Camilo Corbí—; nosotros seguimos siendo muy meticulosos, y eso a veces nos obliga a invertir muchas horas y muchos más recursos de los previstos. Sabemos que eso hace que baje nuestra rentabilidad, pero no vamos a reducir la calidad, sólo sabemos hacer las cosas.”

Mantienen un tamaño medio, de entorno a las 40 personas. Han decidido que es la manera de mantenerse y de diferenciarse, y de seguir fieles a ese espíritu de servicio que les caracteriza. Han tenido propuestas de compra y de fusión con otras ingenierías, porque es un sector que se ha caracterizado en las últimas décadas por la concentración, pero ellos prefieren mantener su esencia. “Siempre hemos dicho que no a las propuestas que hemos recibido —explica Pedro Aguilera— porque las empresas que se nos han aproximado sólo querían referencias, especialización y know-how, pero ninguna tenía interés real por mantener el nombre y el equipo.”

“Tenemos que seguir fieles a nuestros principios —concluye Corbí—, con ese trato especial y directo hacia el cliente, generando confianza. Y trabajando mucho en la formación continua para estar siempre al tanto de las nuevas tendencias e innovaciones, que es lo que nos permite mantenernos en esa primera línea en cuanto a conocimientos y tecnología. Eso es fundamental cuando hablamos de ingeniería.”

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